miércoles, 24 de noviembre de 2010

0.4 Despedida

Adios! Me voy.  Me estoy muriendo y quiero despedirme de todos y de todo. Como un acto último de humanidad o de cortesía con aquellos que me importan. No quiero pasar por grosero al irme sin decirles adiós. No quiero dejarles una mala imagen antes de irme.
Aprovecho este medio para despedirme y me parece bueno, ya que las despedidas no son agradables, y menos cuando son definitivas.  Aunque definitivo no hay nada en la vida.  Es posible que nos volvamos a ver, pero ojalá sea para re-encontrarnos y para alegrarnos por ello.  No quiero más despedidas. No quiero ver caras tristes por mi partida .  Por eso, y aunque ya no dependerá de mí sino de ustedes, no quiero que vengan a despedirme.  Quisiera irme sencillamente, tranquilamente, en silencio, con una sonrisa en los labios, con una carcajada en el corazón y en los ojos y dando gracias a Dios por todo lo que me dió.
¿Que cuándo me voy? En cualquier momento.  Puede ser en el próximo minuto, mañana o en uno de estos días...
¿Para dónde me voy?  No lo sé; ni siquiera sé si es al mismo sitio de dónde vine, hacia mi verdadero hogar o hacia la nada...
¿Porqué? Porque estoy enfermo gravemente, de una enfermedad incurable.  Hasta ahora la ciencia no ha podido hallar la cura y los pocos remedios que hay sólo hacen prolongar la agonía y el dolor de lo inevitable.  Y no quiero pasar mis últimos días recluido en un hospital ni en ningún sitio parecido; ni siquiera encerrado en mi casa, en cama, rodeado de medicinas, aparatos para prolongar mi vida, tanques de oxígeno, bolsas de suero, inyecciones ni enfermeras y familiares que me miran con cara de lástima.
¿Que cómo se llama esa enfermedad?  Qué importa, si no tiene cura.  De todas manera es la muerte, es la vida.
Lamento dejar muchas cosas de esta vida.  Lamento dejarla sin saber siquiera porqué y para qué nací; porqué y para qué viví y porqué tengo que morir...
Lamento dejarlos a ustedes mis amigos, mis compañeros de vida, de algunos momentos de este viaje, porque en algunas ocasiones los sentí tan cercanos, tan queridos, tan amados... que de verdad hubiera dado mucho más por seguir compartiendo las alegrías que me daban, y también, ahora que lo veo bien, los momentos tristes y la rutina del diario trajinar. Me hubiera gustado estar más tiempo con ustedes, que fuera así, pero... "así es la vida", "la vida es un ratico", "nadie es eterno" y todos somos compañía de unos pocos momentos, pasajeros que subimos y bajamos en cualquier parada, en cualquier estación.
De todos modos, quiero darles las gracias por su amistad, su aprecio, su compañía, por su comprensión y por todas las veces que me aguantaron y me soportaron sin querer hacerme sentir mal.
Especialmente, a la mujer que se atrevió a vivir con migo.  Yo no fui una joya ni el premio mayor de ninguna lotería; algunas veces fui una verdadera molestia.  A ella mi gran admiración; no hay palabras suficientes con las que le pueda manifestar mi agradecimiento por su bondad, por su comprensión y por su capacidad de aguante.  Ojalá me perdone y me recuerde por los buenos ratos.  Quisiera que por fin pueda realizar sus sueños y ser verdaderamente feliz.
Lo mismo para mi hijo.  Dios sabe que quiero para él todo lo mejor y que me esforcé sinceramente para dárselo.  Sin embargo, reconozco que soy un ser tan limitado que muchas veces no sé lo que realmente es bueno para él y dándole lo que creo que le será bueno o útil puede ser que no le doy lo que él quiere ni necesita.  También, en mi afán por ser un buen padre, acaso lo molesté y lo presioné demasiado.  También espero que me perdone y que en el trascurso de su vida llegue a apreciar algún día lo que quise hacer para su bien. Lo veo ahora como un joven sano y feliz, y me gustaría que siempre lo siga siendo.

Me iré con la frustración de no saber quién es Él (Dios), sin haber desentrañado el misterio de la vida, sin haber mejorado este mundo ni haber hecho una gran contribución a la mejora de la vida humana.  Pero me voy con la convicción de no haber hecho algo para empeorarlo.  Por eso, me voy con la tranquilidad de saber que mi presencia a nadie le hará falta.
No sé si defraude a alguien que pudiera haber estado esperando algo más de mí.  Tal vez a Dios, por no ser conciente de la misión que me encomendó al crearme; o a mis familiares, por no haber sido la solución a sus problemas económicos y existenciales; o a mis amigos, por no haberles dado la compañía y el apoyo que esperaban;  o tal vez a mí mismo, porque no pude descubrir quien soy realmente ni cuál era el propósito de mi vida.  Porque, a pesar de que siempre supe que pude haber dado mucho más, a veces no pude, en otras no quise y casi nunca supe qué, cómo ni para qué.
Aspiraba a irme tranquilo, pero con tantas frustraciones y cosas pendientes no sé si podré.  No quiero ni es mi intención pasarles mi intranquilidad y frustración a ustedes.  Simplemente quiero que sepan que el reto de la vida ahí les queda a ustedes, que siguen en la lucha, y si pueden descubrir y gozar de sus misterios bienaventurados sean!
Por fin, Adiós! ¿o será sólo un "Hasta luego"?

Para  escuchar y reflexionar, unas canciones de Joan Manuel Serrat: "Si la muerte pisa mi huerto" en los siguientes enlaces :  http://www.youtube.com/watch?v=Tjg2Z61lcTQ, o en:

viernes, 19 de noviembre de 2010

0.3 Mis Creencias

¿Tengo creencias?¿En algo?¿En alguien?¿Es importante lo que creo?¿Porqué?
Mi primera creencia es que "uno vive según lo que cree" o que la vida refleja nuestras creencias.  Pero, ¿Es cierto?  A veces lo dudo.  A veces percibo la vida separada de lo que creo; que por un lado va lo que creo y por otro como vivo.  ¿Se pueden dar ejemplos?  A ver.  Si digo que creo en Dios ¿Cómo se vería esto reflejado en mi manera de vivir?  Mis comportamientos mostrarían una persona de fe.  Pero yo mismo me veo de muy poca fe.  Entonces puedo decir que mi fe en Dios es poca, o decir que creo en Dios no se refleja en mi manera de vivir.  Entonces, ¿la manera de vivir refleja una fe o unas creencias o es independiente de eso?  Si es independiente, entonces ¿para qué las creencias, la fe? serían un autoengaño si no tienen nada que ver.
Creo en la vida más que en la muerte.  esto quiere decir que prefiero estar vivo a estar muerto, aunque a veces piense en lo contrario.  Para mí, vale más estar vivo porque es lo que conozco; no valoro la muerte porque no sé lo que es, lo que nos espera.  Entonces, me aferro a lo conocido.  Otra cosa es que sepa "sacarle jugo a la vida", disfrutarla.  Ese es un aprendizaje que se logra viviendo.  Por ahora, puedo decir que la vida "es buena" porque son más las cosas "buenas" que me pasan que las "malas".  Otra cosa para aclarar es lo que es "bueno" y lo que es "malo".  Por ahora, "bueno" es lo que me produce bienestar, alegría, placer, seguridad, tranquilidad...  "Malo" lo que me trae malestar, tristeza, dolor, incomodidad, inseguridad, intranquilidad, miedo...
Para mí, la vida es "buena" porque me ha dado más de lo primero que de lo segundo.  Por eso creo que es buena y vale la pena vivirla.  Otra cosa pudiera pasar (creer) si me sucedieran cosas desagradables...
Creo que es mejor ser optimista que pesimista: esperar que suceda la mejor que estar viendo catástrofes y pesadillas.  Sin embargo, no soy ni lo uno ni lo otro; me considero "realista".
Creo que es mejor ser alegre que triste.  Pero no soy alegre ni triste, soy más bien "tranquilo", o se podría decir "ecuánime" - de ánimo igual- no es que sea indiferente.  No soy de los que rien por todo; tampoco de aspecto triste a cada momento.
Creo que es mejor ser inteligente que tonto, saber que ignorar; aunque a veces parece mejor no saber ciertas cosas...
Creo mejor tener lo suficiente que carecer; aunque también dudo porque el carecer hace valorar más lo que se tiene o lo que se necesita y nos mueve a conseguir lo que hace falta.  La carencia es la madre de la actividad y la creatividad.  Tener más de lo necesario lleva a la inactividad, la pereza y también al vicio.
Creo en la paz y en los medios pacíficos más que en la violencia.  aunque si no hay otra salida que pelear... pero éste debería ser el último recurso.  la paz es el ideal, lo mismo que las vías del diálogo, la concertación, el convencimiento por las mejores razones.  El mundo no es ideal; en realidad parece que se impone el más fuerte sobre el más débil, es la "ley salvaje".  Todavía nos falta mucho para ser "civilizados", que lo entiendo como verdaderamente racionales, capaces de buscar el beneficio mutuo, la justicia.
No creo que la religión sea mejor que la irreligiosidad.  Mejor dicho, no creo en la religión.  Creo que nos distrae de la búsqueda de Dios, que nos muestra un rostro del mismo que "no es".  Creo que en lugar de ayudar entorpece.  Creo que la religión entendida como ceremonias, ritos y rezos no ayuda a encontrar a Dios ni al prójimo como hermano.  Más bién nos divide entre "fieles" e "infieles", "creyentes" y "ateos", "salvados" y "condenados", "los que están en la verdad" y "los descarriados".
No creo que necesitemos ser salvados por otros que se autoproclaman "apóstoles", "enviados", "iluminados", "misioneros", "profetas", etc.
Creo en Dios.  Fui educado en una familia católica, por lo que el Dios en que creía era el de la Biblia.  Digo "creía" porque ya no creo en ese dios lleno de contradicciones, porque nos decían que hay que amar sobre todas las cosas a un dios que nos mete miedo, terrible, castigador, que nos condena por cualquier error, un dios prepotente y egoista.  Prefiero creer en el Dios que describen como un padre amoroso, comprensivo, que está dispuesto a perdonar siempre y acoger a sus hijos, aunque se hayan descarriado y desobedecido sus mandatos, en el Dios que "dispone todas las cosas para el bien de sus hijos".  ¿Cuál es el Dios verdadero? Eso lo analizaré en otro momento.
Creo que el amor es mejor que el odio y que la indiferencia.  Creo que el amor nos puede transformar y hacer mejores personas.  Sin embargo, no sé porqué creerlo no me ha llevado a ser una persona más amorosa.
Esto es una de las cosas que me hace pensar que no es suficiente con creer.  Se necesita algo más para transformarse a sí mismo.  Yo creo en ciertas cosas, pero no vivo como creo.  Yo quiero convertirme en lo que creo, pero me hace falta algo para lograrlo.  ¿Qué es?  ¿Decisión?, ¿realización?, ¿convencimiento?, ¿motivación?...  Tal vez un poco de cada cosa.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Un día de Gracia

Un día de gracia

Un día más, un día más, 
un día de gracia bajo el sol.

para reír y estornudar
un día nuevo como un pan,
como una novia que se da
sin guardar nada para si
quiero creer que puede haber
un día de gracia para mi!
 
Un día más, un día más
un día de gracia para mi!
 
Cuando me digan que ya está,
que es el momento de partir,
de abandonar esta ilusión,
de estar despierto y de vivir;
les pediría un poco más
frente a este azul que pinta el mar
y entre tus pechos amarrar
mi corazón una vez más.

Un día más, un día más,
un día de gracia para mí!
 
Para cantar esa canción
que nunca pude terminar,
para bailar y reventar de vino,
hablando del ayer.
Para decir una vez más
que no me pesará partir
si estas tendida junto a mi
y entre los dos la libertad.
 
Un día más, un día más
un día de gracia para mi!
 
Para ver el video de esta canción: http://www.youtube.com/watch?v=CZOB3_uhm3o 
 
Víctor Heredia. El autor de esta canción, (n. 24 de
enero de 1947) es un destacado cantautor argentino. Nació en el barrio
de Monserrat, de la ciudad de Buenos Aires.  Entre sus obras se encuentran éxitos como "Todavía Cantamos",
"Sobreviviendo", "Coraje", "Razón de vivir", "El viejo Matías", "Ojos
de cielo" o "Dulce Daniela".  Los datos de su biografía, canciones y demás, en su página web:
http://www.victorherediaweb.com.ar/ 

Es así la vida

ES ASÍ LA VIDA

Canta: José Vélez

Todos queremos vivir a pesar de lo mucho que hay que sufrir.
Todos queremos cantar, aunque a veces la vida nos hace llorar.
Cuánto nos gusta soñar, aunque al despertar todo esté igual que ayer.
No nos da miedo luchar aún sabiendo que al fin no podremos vencer.

Es así la vida, para ti y para mí;
Es así la vida, lo importante es vivir.
Es así la vida, para ti y para mí;
Es así la vida…

Todos queremos andar aunque no haya caminos por donde pasar
Y sembrar trigo al azar aunque luego nos nieguen un trozo de pan.
Todos queremos ganar aún sabiendo que el mundo nos hace perder;
No nos da miedo echar los sueños a volar para después caer.

Es así la vida, para ti y para mí;
Es así la vida, lo importante es vivir.
Es así la vida, para ti y para mí;
Es así la vida…



José Vélez, es un cantante canario nacido el 15 de noviembre de 1951 en Telde, Gran Canaria   y cuyo verdadero nombre es José Velázquez Jiménez.

Mi comentario. ¿ Qué más podría agregar a lo que dice esta canción? Hay grandes verdades dichas de una manera tan sencilla, que sólo queda la admiración.